Lavanda: el aceite que nos da tranquilidad
La lavanda es símbolo del renacimiento. Es un protector astral y nos limpia universalmente renovando nuestro carácter, combatiendo los problemas emocionales como la depresión, manías, irritabilidad y las emociones violentas.
Elimina los miedos, la melancolía, los estados de ánimo nerviosos, el estrés cotidiano que no nos deja dormir, relajando nuestra mente y devolviéndonos el bienestar físico.
La lavanda alienta a la honestidad emocional, e insiste en que uno puede dejar salir sus pensamientos y deseos más íntimos. Además, ayuda a trabajar en la comunicación con los demás.
Uso Sugerido:
Aromático: inhalar directamente, difuso, diluido o con unas gotas en la mano frótese e inhálese.
Tópico: Diluya una o dos gotas con aceite portador, y aplíquelo donde sea necesario.
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